Concepto
y funciones
Las hojas
son órganos laminares de simetría dorsiventral y, crecimiento y vida limitados,
dispuestos lateralmente sobre el tallo. El conjunto de tallo y hojas recibe el
nombre de brote. Las hojas se
producen en las yemas del tallo; comienzan como primordios foliares,
constituidos por tejidos meristemáticos; sin embargo, la hoja adulta está
formada por tejidos diferenciados y no posee meristemo. (Cavero y López, 1994)
En
opinión de García y col. (1988), morfológica y anatómicamente la hoja es el
órgano más variable de la planta. El término colectivo para todos los tipos de
hojas que aparecen en una planta es el de filoma. Los filomas de los
espermatofitos son muy variables, tanto en su estructura interna y externa como
en su función, y se clasifican en, cotiledones, catafilos, profilos, nomofilos
e hipsofilos.
La
estructura de los tejidos conductores del tallo y los que se encuentran en el
pecíolo y nervio principal de las hojas suele ser semejante aunque con
variaciones en la disposición de los mismos, pero difieren entre sí en las
características de su crecimiento. En el tallo, el crecimiento apical es
indefinido mientras en la hoja el ápice tiene un crecimiento limitado, casi
siempre de escasa duración. Lo mismo puede decirse en cuanto a los tejidos
parenquimáticos que se presentan en el cortex del tallo y en el mesófilo de la
hoja. Sin embargo, la hoja tiene funciones muy específicas, como son la
fotosíntesis y la respiración, para las cuales se encuentra muy especializada,
tanto en su estructura como en su fisiología.
Santamarina
y col. (2004) destacan que esta especialización funcional hace que, a
pesar de la semejanza estructural entre el tallo y las hojas, existan entre
ambos notables diferencias, pues en la hoja el crecimiento apical es limitado y
la disposición relativa de los tejidos es diferente. Mientras que la forma
cilíndrica del tallo facilita las funciones del mismo, la forma laminar de la
hoja, al aumentar de este modo la superficie de contacto con el medio, facilita
la captación de energía luminosa y también sus intercambios gaseosos. Además,
la hoja, a diferencia del tallo, no suele presentar tejidos de reserva y está
formada en general por tejidos primarios, no formándose peridermis.
Las hojas
tienen funciones muy especificas, ya nombradas anteriormente, que son las
siguientes:
- Fotosíntesis, captación de energía
luminosa favorecida por su amplia superficie y por la adecuada orientación a la
luz. La clorofila es un pigmento verde encargado de absorber la luz adecuada
para realizar este proceso.
- Respiración, en presencia de la luz
toman dióxido de carbono y desprenden oxígeno y vapor de agua; en la oscuridad
toman oxígeno y desprenden dióxido de carbono y vapor de agua.
Finalmente, para que resulte más cómoda, la forma de búsqueda de la morfología de las plantas, os dejamos un índice enlazado a cada uno de los apartados desarrollados. Deseamos que sea de vuestra entera satisfacción:
RAÍZ
- Partes
- Clasificación
TALLO
- Partes
- Clasificación
HOJAS
- Partes
- Clasificación
INFLORESCENCIA
- Partes
- Clasificación
FLOR
- Concepto y funciones
- Partes
- Clasificación
FRUTO
- Partes
- Clasificación
SEMILLAS
- Partes
Bibliografía:
CAVERO,
R.; LÓPEZ, M.L. (1994). Introducción a la Botánica. Editorial Eunsa.
Pamplona. 172 pp.
GARCÍA
LUIS, A.; SANTAMARIANA SIURANA, P. (1988). Morfología vegetal. Universidad
Politécnica de Valencia. 168 pp.
SANTAMARINA,
P.; VILELLA, V.; ROSELLÓ, J.; GARCÍA, F.J. (2004). Biología y Botánica.
tomo I. Editorial UPV. Valencia. 298 pp.
0 comentarios:
Publicar un comentario