Despedida a un gran corazón

Antes de entrar en lo que mi corazón desea y necesita decir quería agradecer a las siguientes tres personas me cedan sus fotos para esta ocasión tan especial como son Montserrat Picas, Trammy Huynh y Beatriz Tomlinson. Mil gracias a las tres por querer a la vida natural y captarla con tanta calidad y sobre todo cariño.

En esta ocasión, no es Plantukis, no hoy no, solo os escribe el pequeño inexperto que quiere aprender, que quiere descubrir y cuidar este entorno que agoniza para que sea algo más respetado, este pequeño alunizado que no lunático que piensa que un poquito de todos puede mover enormes toneladas de mentiras y falsedades, tanta hipocresía y resentimiento de esta suciedad en la que vivimos a la papelera.

Soy necio de mis palabras, en la vida hay que aplicar a todo, lo que predica. El domingo me dio una lección, mi tío falleció después de estar luchando diez años contra cualquier impedimento que la salud le otorgaba, por mucho dolor que sufriera ese cuerpo no faltaba una sonrisa en su alma, por miles de contratiempos y sorpresas, mi tío sacaba fuerzas por vivir, no sé de donde las sacaba o puede que sí, el amor a la vida y a los seres humanos que le cuidaban a todas horas como son su mujer e hijos, nunca he visto tanta ternura.

Por eso me hago autocrítica, por no estar cuando podía, por no ir cuando no podía porque el amor a una persona tan especial debe ser a todas horas, todos los días, nunca se es pesado si viene desde el cariño y el respeto. Reconozco y creo que hablo en el nombre de mi padre, hermano y yo que somos muy dejados en algunos aspectos que no debían de pasar inadvertidos en nuestras vidas, sobre todo cuando lo que sentimos no corresponde a lo que hacemos. Estas tres flores son para ti mi querido tío, de tus dos sobrinos y de tu hermano que siempre te hemos tenido en el corazón, ya sabéis que no soy persona de Fe pero sé seguro que allí donde tu estés las recibirás con alegría.

Para finalizar, y esto es para todos los que han leído hasta aquí, el amor no tiene fronteras ni excusas, no hay prioridad al cariño y el amor. Es bonito recordar  el pasado pero es  valiente enfrentarse al futuro. Nunca debe haber excusa a un acto mal realizado, pero si voluntad para no volver  a ocasionarlo. Esto se puede aplicar a cualquier circunstancia de la vida.